martes, 24 de marzo de 2015

Camino Neocatecumenal.



 El Camino Neocatecumenal, una gracia del Espiritu Santo.



"El compromiso de anunciar el evangelio a los hombres de nuestro tiempo, animados por la esperanza, pero tambien agitados frecuentemente por el miedo la angustia, es sin duda un servicio que se presta no solo a la comunidad cristiana sino a toda la comunidad" (Evangelii Nuntiandi, 1)

De acuerdo con esta sensibilidad eclesial y como respuesta concreta a la invitacion del Concilio de afrontar la realidad de un pueblo no evangelizado y reanudar con nuevo impulso la aventura misionera de la Iglesia (Mt 28, 19-20), esta madurando en estos años una experencia de iniciacion cristiana de adultos tan significativa como estimulante: el neocatecumenado o las comunidades neocatecumenales.

 Datos importantes.

El Camino Neocatecumenal es un instrumento al servicio de los Obispos, que nació por inspiración del Espíritu Santo y la Virgen María hace alrededor de 50 años como respuesta al Concilio Vaticano II. El Equipo Responsable Internacional del Camino está compuesto por el señor Kiko Argüello -responsable del mismo- y la señora Carmen Hernández, iniciadores del Camino Neocatecumenal y por el presbítero Mario Pezzi del clero diocesano de Roma. El Camino ha contado con el apoyo de anteriores Pontífices como Pablo VI y Juan Pablo II. Cuando el actual Papa, Benedicto XVI era el Cardenal Ratzinger, llevó el Camino a Polonia y empezó el proceso de estudio de los Estatutos que duró 5 años y finalmente fueron aprobados por el Pontificio Consejo para los Laicos y por Ratzinger siendo ya Papa. A través de este Camino se redescubre la iniciación cristiana de los adultos
bautizados entre los que podemos señalar:
1. Los que se han alejado de la Iglesia. 
2. Los que no han sido suficientemente evangelizados y catequizados. 
3. Los que desean profundizar y madurar en su fe.
4. Los que provienen de confesiones cristianas que no están en total comunión con la Iglesia Católica. 

Dentro de la Parroquia el Neocatecumenado es vivido en una pequeña comunidad denominada comunidad neocatecumenal que tiene como modelo a la Sagrada Familia de Nazaret, lugar donde el Hijo de Dios hecho Hombre, se hace adulto creciendo “en sabiduría, edad y gracia”, estando
sometido a José y María. En la comunidad, los neocatecúmenos se tornan adultos en la fe, creciendo en humildad, sencillez y alabanza sometidos a la Iglesia.

El Neocatecumenado consta de unas catequesis iniciales que anuncian el kerigma que llama a conversión: la buena noticia de la muerte y resurrección de Nuestro Señor Jesucristo. Luego se inicia el itinerario neocatecumenal que se basa en un trípode que es el fundamento de la vida cristiana resaltado por el Concilio Vaticano II: Palabra de Dios, Liturgia y Comunidad. 

El Neocatecumenado es guiado, en comunión con el Párroco y bajo su responsabilidad pastoral, por un Equipo de Catequistas que a su vez son guiados por el Equipo Responsable nacional del Camino en el país, que está bajo la dirección del Obispo. 

En el Camino Neocatecumenal se suscitan diferentes carismas, desde los ostiarios que le sirven a los hermanos disponiendo el salón donde se lleva a cabo la celebración semanal de la Palabra de Dios y los sábados la Eucaristía, preparando los alimentos, lavando trastes y atendiendo a los hermanos en convivencias de fin de semana; también están los lectores, los salmistas, los maestros de niños, los catequistas; hasta los catequistas itinerantes que lo dejan todo para irse a evangelizar donde los necesiten igual que las familias en misión, los presbíteros en misión, las vocaciones religiosas de muchachas que entran a conventos de clausura y muchachos que se preparan para ser presbíteros en los seminarios del Camino Neocatecumenal, que son los seminarios misioneros diocesanos Redemtoris Mater de los que hay alrededor de 70 repartidos por el mundo. 
Cruz gloriosa, al fondo icono oficial del Camino Neocatecumenal.

No hay comentarios:

Publicar un comentario